Si la vida fuera como un sueño, simplemente sería perfecta. Viviendo contigo todo lo que quiero, sin que nada sea un deseo, teniéndote cerca cada vez que te veo. Sería todo como yo elija, caminarías conmigo sin ninguna prisa, juntos de la mano, aislados de todo, solo juntos y enamorados. Tu mirada se posaría en mi cada vez que yo quiera, y tus brazos me rodarían cada vez que tenga frío, o simplemente cada vez que necesite tu abrazo. Todo sería perfecto, solo porque estaría contigo. Por más que trate de convencerme sé que la vida no es un sueño, y todo lo que estoy viviendo es la cruda realidad, que tiene un destino marcado, y por más que hagamos todo lo posible para cambiarlo, si las cosas tienen que suceder, suceden, y si yo te tengo que perder, te perderé.