Aunque no lo crea, tu partida no me afecta. Fue algo predecible, miles de veces escuché decir que las segundas oportunidades nunca terminan bien. Todo lo que pasó fue el cable a tierra que andaba necesitando, pero sólo por un tiempo. Estaba equivocada al pensar que todo había cambiado, que había vuelto a ser lo que un día fue. El rencor sigue en nosotros, y se lo puede sentir. Y es que de verdad no entiendo como tus sentimientos pueden llegar a ser de esta manera. Un día me quieres y al otro no; ¿De verdad pretendes que siga a tu lado? Ya no soy la misma ilusa que se dejaba llevar por esa sonrisa encantadora. Es que de verdad yo sentía la conexión cuando estábamos cerca, hasta por un momento llegué a pensar que la química que un día hubo había vuelto a renacer. Duele aceptar que fuiste la primera persona de la que me enamoré sin pensarlo, sin darme cuenta ya estabas dentro mío. Nunca quise lastimarte, pero nunca pudiste entenderlo. Todos cometemos errores, sabes? Y nunca me arrepentí tanto de haberte hecho sufrir. Se pide perdón honestamente cuando uno está arrepentido, acaso no te lo enseñaron? Por lo que veo no, porque lo que menos escuché salir de tu boca fueron unas miseras disculpas.
Ahora ya es tarde cariño, lo siento pero tu tiempo ya pasó, se fue junto con el amor que algún día sentimos los dos. No culpemos a ninguno, fue culpa del desamor.

Víctima - Luis Fonsi.

Podría decirte mil cosas, como lo mucho que me gustaba tu sonrisa, los silencios llenos de tu mirar y el tono de tu voz. Pero sé que no me saldría el valor para decirlas, aunque te tuviera justo delante de mí otra vez, como en los viejos tiempos. Y la verdad es que no serían necesarias palabras, porque nos faltaron miles y todavía no tengo ni una duda de que en algún momento pensaste lo mismo que yo. No puedo olvidarte, lo admito, porque por mucho que sienta pequeñas espinas clavarse en mi corazón sé que te sigo buscando en cada esquina, sigo yendo a los sitios a los que solías ir y me sigo frustrando al imaginarme tus pasos bajo mis pies, en un momento diferente. No sé si me entiendes, porque ni siquiera yo me entiendo, pero espero que algún día llegues a pensar en esto, como solíamos hacer juntos, que sonrías y sigas con tu vida.

Es la última, la última chance antes de que me vaya. No entiendo tu juego, y no quiero jugar, clavarme la espina no será tu final. 

Mi pasado te llevaste conquistando mi presente, ahora queda en mí la decisión de que hagas lo mismo con mi futuro.

Tú sigues jugando, sin importarte mi interior, pero se te olvidó que la que tiene el control acá soy yo. 

Te siento cerca y todo es mejor, pero no creo que esto sea una buena opción. Odio tener que admitirlo, odio tener que decir que las segundas oportunidades, nunca terminan bien.

Se acerca el final? No lo puedo decir, pero no estará en tus manos la entera decisión. Hoy esto lo manejo yo, hoy te saco de mi interior para tenerte a un costado, a un costado de mi corazón. En el lugar que estás dueles bastante, por eso decido cambiarte. No dejo de quererte, pero dejas de importarme.